Un reciente informe de Bankinter augura que el próximo año 2017 será un buen año para el mercado inmobiliario, ya que se prevé un aumento de la demanda de propiedades, así como un incremento de los precios de las viviendas. Estos datos son alentadores y se suman a los facilitados por el Ministerio de Fomento que comunicaba hace unos meses que el stock de inmuebles en venta en España ha bajado hasta las 493.112 casas durante el primer trimestre de 2016.
Estos síntomas de recuperación está impulsados principalmente por particulares que, tras varios años sin atreverse a comprar casas, han recuperado la confianza gracias a los precios competitivos que hay en la actualidad y a la facilidad que de nuevo dan los bancos para poder acceder al crédito. Aún así, los futuros compradores se han vuelto más cautos y exigentes y solicitan mucha más información para decidir si quieren comprar una vivienda o no. Estas son algunas de las cuestiones que hay que preguntar al comprar una casa:
¿Qué gastos tiene la vivienda?
Más allá del precio final por el que se vende una casa o de si se obtenido algún tipo de ayuda económica para comprar vivienda, hay que informarse bien acerca de los gastos que tiene ésta mensual o anualmente. En la actualidad, si sabes cómo y dónde buscar, se pueden encontrar inmuebles espectaculares a precios bastante asequibles. Sin embargo, lo que hay que preguntarse es cuáles son los gastos de mantenimiento de dicha propiedad. En muchas ocasiones lo que realmente encarece una vivienda no es el precio por el que se compra, si no lo que cuesta mantenerla. Por tanto, es conveniente solicitar al promotor o propietario los gastos estimados de electricidad, agua, comunidad, etc. También deberás informarte sobre la cuantía de IBI que tendrás que pagar de manera anual que depende de varios aspectos como el valor catastral y el coeficiente.
¿Por qué vende la casa el propietario?
En en el caso de los inmuebles de segunda mano, la venta suele esconder unos motivos. Estos no tienen porqué ser malos pero es conveniente preguntar al propietario o agente inmobiliario cuáles son las razones por las que se ha puesto a la venta dicha propiedad. Muchas veces estas transacciones esconden problemas estructurales en la vivienda, vecindarios conflictivos o gastos demasiado elevados que no se pueden mantener. Exige que se te informe al respecto para no llevarte sorpresas una vez adquirida la vivienda.
¿Tiene algún tipo de carga el inmueble?
Este aspecto es bastante importante y tiene que ser una de las primeras cosas que debes averiguar si estás interesado en comprar un piso. Lo primero que tendrás que hacer es dirigirte al Registro de la Propiedad para comprobar que realmente la persona con la que estás tratando es la propietaria de dicha vivienda. Allí también te informarán sobre posibles cargas que pueda tener la vivienda como, por ejemplo, si pesa alguna orden de embargo sobre ella, si está hipotecada o si hay alguna deuda con la comunidad de vecinos. De esta manera te cubrirás las espaldas, pues si existe alguna deuda y lo descubres después de comprar la casa serás tú el responsable de pagarla.
¿Cuánto tiempo lleva la propiedad a la venta y cuántas personas la han visitado?
Aunque este dato pueda parecer irrelevante en un principio, lo cierto es que tiene valor a la hora de negociar el precio final por el que se va a somprar la vivienda. Si es una casa que lleva mucho tiempo a la venta, quiere decir que tanto el propietario como la agencia inmobiliaria que tiene la propiedad en cartera tendrán prisa por venderla. Además, si es una casa que ha visitado mucha gente, significa que por diversos motivos están teniendo problemas para deshacerse de ella. Ambos aspectos son una baza a tu favor, ya que probablemente podrás pactar el precio final de compra obteniendo una rebaja considerable.
¿Cómo es el vecindario y el entorno?
Si la casa que tienes previsto comprar es para vivir de manera habitual o para residir durante determinados periodos del año, como vacaciones y fines de semana, es conveniente que indagues bien acerca de cómo es el vecindario. ¿El motivo? Muchas veces una casa bonita y asequible esconde problemas como vecinos ruidosos o problemáticos. También es importante conocer el entorno y los alrededores. ¿Tiene servicios cerca?, ¿pasa el transporte público por la zona?, ¿existen buenas vías de comunicación y de acceso a la vivienda?, etc. Son pequeñas cuestiones que pueden marcar la diferencia.
En Grupo Esmeralda no tendrás que preocuparte por este tipo de aspectos, ya que ponemos a tu disposición desde un principio toda la información acerca de los inmuebles que representamos. Además, siempre nos aseguramos de que cumplan con unos requisitos mínimos de calidad para incluirlos en nuestra cartera. Así es como hemos conseguido ser la inmobiliaria líder en Calpe desde 1979.