El pasado mes de abril un juzgado de Madrid dictó una sentencia en la que se declaran inválidas las cláusulas suelo de más de 40 entidades bancarias y cajas de ahorro por considerarlas “abusivas” y “poco transparentes”. Saltaba así el escándalo de las cláusulas suelo que, a día de hoy, todavía está dando coletazos. ¿Por qué? Porque muchas personas desconocían que sus hipotecas estaban supeditadas a dicha disposición y fue a raíz de este dictamen cuando descubrieron el asunto. ¿Crees que te puede afectar este problema? A continuación te explicamos qué es una cláusula suelo y cómo puedes averiguar si tu hipoteca la tiene.
¿Qué es la cláusula suelo?
Las hipotecas a tipo variable toman como índice de referencia el euríbor, una tasa de intereses a nivel europeo que fluctúa constantemente y, por lo tanto, hay temporadas que está más elevada y otras más baja. Normalmente, cuando un banco concede un crédito a un particular exige en la devolución el pago del euríbor más un diferencial. Por ejemplo, euríbor+1. ¿Qué significa esto? Que el hipotecado tendrá que devolver los intereses del Euribor más un punto añadido.
Las hipotecas sujetas al euríbor generalmente se revisan cada año y se actualizan al alza o a la baja, según la situación de dicho índice en el momento de la revisión. Como este indicativo está oscilando continuamente, las entidades bancarias decidieron en su momento fijar unas cláusulas de suelo y techo para fijar unos límites con los que el euríbor nunca superase ni bajase de una determinada cifra. El problema es que con la cláusula techo el tope que se marcó era muy elevado, alrededor del 13%; mientras que con la cláusula suelo el límite rondaba el 2 o el 3%. Es decir, los bancos no se verían perjudicados aunque el euríbor estuviera en índices muy bajos, pues el mínimo les garantizaba unos ingresos base.
En el año 2009 el euríbor alcanzó un mínimo histórico por debajo del 1%, sin embargo, muchos hipotecados no vieron disminuidas sus cuotas y fue así como descubrieron que sus hipotecas estaban sujetas a la ya famosa cláusula suelo. Ante este hecho que los afectados consideraban injusto, un grupo de perjudicados (más de 15.000 personas) decidió unirse e interponer una demanda colectiva gestionada por la asociación Adicae, obteniendo el resultado anunciado al inicio del artículo.
¿Cómo saber a quién afecta y cómo reclamar?
Pese a que el resultado de esta demanda solo va a repercutir a aquellos afectados que se sumaron a la causa, se considera que marca un precedente y que el resto de los perjudicados podrán reclamar con altas posibilidades de obtener un resultado favorable. Los afectados son todos aquellos que tienen hipotecas de tipo variable con una disposición en la que se afirme que, aunque el euríbor esté por debajo del 2 o el 3%, el hipotecado no verá reducidos los intereses a pagar. Según datos del Banco de España, en nuestro país hay alrededor de un 30 y un 40% de hipotecas sujetas a dicha condición.
Según un estudio de AFI (Asesores Financieros Internacionales), se estimula que los bancos y cajas de ahorro afectados tendrán que devolver más de 5.200 millones de euros. Eso sí, dado que ni en la sentencia dictada por el juzgado de Madrid ni en otra del año 2015 del Tribunal Supremo existe retroactividad, las entidades financieras sólo estarán obligadas a devolver los intereses cobrados de más a partir del año 2013 que fue cuando se dictó la primera resolución.
Si crees que tú o algún conocido se puede haber visto afectado por dicha disposición, lo que hay que hacer es dirigirse a la entidad bancaria en cuestión e intentar negociar las condiciones de devolución de los intereses, ya que a raíz de estas sentencias muchos bancos se sentaron a hablar con los afectados y pactaron tanto la suspensión de dicha cláusula de la hipoteca como la devolución del dinero. Si, por el contrario, tu banco o caja se niega a negociar, siempre puedes recurrir a la vía judicial que será mucho más lenta y tediosa pero en la que, como se ha comprobado, hay precedentes para obtener un resultado positivo.
En cuanto a aquellos que actualmente no están hipotecados pero se plantean en los próximos años adquirir una casa, aconsejamos que se fijen bien y exijan al banco que les explique todas las condiciones que implica firmar una hipoteca con ellos. Si se desconoce el tema, lo mejor es recurrir a una entidad que pueda asesorar al respecto. En Grupo Esmeralda tenemos muchos años de experiencia y contamos con profesionales de prestigio que pueden ayudarte a la hora de comprar una vivienda. ¿Te interesa? Ven a visitarnos y te informaremos al respecto.